Los talleres tienen una gran colección de pequeñas cajas japonesas (kobako) e inros. Los artistas japoneses han jugado con formas, materiales y efectos materiales para crear estas piezas coleccionables y decorativas. Estos objetos extraordinarios producidos con precisión y minuciosidad comparable al trabajo de la orfebrería están adornados con decoraciones armoniosas y poéticas inspiradas en la flora y la fauna.